Es momento de jubilar esas sillas de comedor aburridas que llevan años en tu casa. ¿Quién dijo que lo funcional tiene que ser monótono? Si tu estilo rompe esquemas, tu espacio también debería hacerlo. Tu comedor no es una sala de espera, así que olvídate de lo genérico y dale un giro con sillas para comedor cómodas que realmente hablen de ti.
Por eso, hemos preparado esta guía para ayudarte a elegir las mejores opciones, esas que no solo sean confortables, sino que también marquen tendencia y reflejen tu personalidad. Si buscas diseño sin caer en lo típico, sigue leyendo. Aquí te mostramos cómo dejar lo convencional en el pasado y hacer que tu comedor sea un statement. ¿Te atreves?
1. No juegues a la ruleta con el espacio
Antes de volverte loco con el diseño, asegúrate de que las sillas de comedor que elijas realmente encajen en tu espacio. No se trata solo de estética, sino de funcionalidad. Mide tu mesa, el área disponible y ten claro cuántas sillas cómodas puedes colocar sin que todo se vea apretado o desordenado.
Saca la cinta métrica y confirma todo: altura de la mesa, grosor del tablero y cualquier detalle que pueda afectar el espacio para las sillas. Más vale medir dos veces que terminar con un comedor incómodo.
2. Espacio, no Tetris: que todo encaje sin caos
Ya tienes las medidas, ahora es momento de jugar con el espacio. No se trata sólo de cuántas sillas de comedor caben, sino de que todo fluya sin apretar.
Las sillas para comedor suelen medir entre 45 y 50 cm de ancho, pero si tienen brazos, ocupan más espacio. Y si dudas entre comprar 4, 6 u 8, sé realista: prioriza cuántas usas en el día a día antes de pensar en las reuniones familiares que ocurren… ¿una vez al año?
¿Buscas modelos que ocupen poco espacio? Sillas sin brazos como el modelo Duriyee son una excelente alternativa, además de una opción atractiva que mezcla ratán y madera. Y si te interesa un modelo más minimalista la silla metal Dak blanco es simplemente perfecta.
3. Tu estilo, tus reglas: elige sin miedo
Las sillas no son solo para sentarse, también dicen quién eres. Si te gusta lo simple y fresco, las sillas de madera con líneas limpias son un gol. Si vas a pasar horas ahí (ya sea comiendo, poniéndote al día con las últimas novedades o trabajando), las sillas tapizadas son lo que necesitas.
¿Material? Tela para darle un toque fresco, cuero para no sufrir con las manchas o metal si quieres un look moderno.
¿Brazos? Solo si tienes espacio, si no, mejor prioriza la comodidad. Y ya que hablamos de brazos, te recomendamos algunos modelos como el Vima Beige hecha en polipropileno y con un estilo moderno. Y para salir de lo convencional ¡Apuesta por la silla Sandama! Que mezcla madera de fresno y ratán.
4. Rompe las reglas: mezcla, combina y gana
¿Quién dijo que todo tiene que combinar perfecto? Jugar con diferentes estilos hace que tu comedor tenga más personalidad. Puedes usar un par de sillas resistentes contrastantes en los extremos o mezclar varios modelos manteniendo un hilo conductor: color, altura o material. ¿Mesa rústica? Prueba sillas blancas o con cojines llamativos. ¿Mesa clara? Añade texturas con madera o metal, como el modelo Soho con estructura de metal y asiento y respaldo tapizados. Y recuerda: ¡Lo importante es divertirte y crear un espacio que se sienta único, sin miedo a romper esquemas!
5. Ajusta la altura o ajusta tu postura (y no quieres lo segundo)
Si no quieres terminar encorvado o con las rodillas chocando, presta atención a la altura del asiento. La clave está en dejar suficiente espacio entre la mesa y tus piernas para moverte con comodidad. No te confíes solo de las fotos: revisa las medidas y considera si la mesa tiene detalles que puedan restar espacio.
6. Que las patas también tengan estilo
Las patas de tus sillas no son un detalle cualquiera, son parte del carácter de tu comedor. ¿Tienes una mesa con base llamativa? No la entierres detrás de patas gruesas y aburridas.
¿Prefieres algo más rebelde? Las patas voladizas desafían la gravedad y las reglas al mismo tiempo. Al final, se trata de encontrar el balance entre estilo y funcionalidad. No hay reglas fijas (y si las hay, rómpelas), pero asegúrate de que las patas sumen a la vibra general de tu comedor. ¿Quieres algo diferente? Echa una mirada a los modelos Smash en gris claro con patas de madera o en gris claro con patas de metal que tienen patas que van reduciendo su diámetro hasta la base.
7. Comodidad sin concesiones
Si una silla se ve increíble, pero después de 10 minutos ya quieres levantarte, algo está mal. Aquí el diseño no solo se mira, se vive. Si tu comedor es el punto de encuentro para largas conversaciones, elige sillas con respaldo envolvente o asientos acolchonados que inviten a quedarse. Algunas opciones son el modelo Wichita con base de madera y asientos tapizados. Si quieres escapar de los diseños típicos, dale una mirada al diseño Alley Gris ¡digna de un diseñador!
Y si buscas un giro inesperado, modelos giratorios o de altura ajustable rompen con lo tradicional y suman dinamismo al ambiente. Porque sí, puedes tenerlo todo: forma, función y un diseño que no pasa desapercibido.Si sigues estos consejos, tu comedor dejará de ser un simple espacio y se convertirá en una declaración de estilo. En NIHM Design, creemos que el diseño no tiene por qué ser predecible. Aquí las sillas no solo cumplen una función, sino que elevan tu ambiente con piezas que escapan de lo convencional. Así que olvídate de lo típico y atrévete a elegir sillas que hablen por ti, que desafíen lo estándar y que hagan de cada comida una experiencia con carácter. Explora nuestra colección y dale a tu comedor el toque auténtico que se merece.